¿Te has preguntado alguna vez cómo se vería tu fachada literalmente en vertical? La rehabilitación de fachadas en Madrid en muchas ocasiones se realiza mediante este método de trabajo vertical. Durante la época de los años 80 y 90, obreros de la construcción y amantes de la montaña introdujeron técnicas de escalada a su actividad profesional. Espeleólogos, alpinistas o escaladores fusionaron su pasión por los deportes de montaña con su labor en la construcción. Como consecuencia de ello, nacieron los trabajos verticales. En la actualidad muchas empresas emplean este sistema de trabajo.

¿Sabías que los egipcios ya lo utilizaban?

Los trabajos verticales, como la rehabilitación de fachadas en Madrid, son conocidos por el hombre desde hace siglos. Se tiene constancia de que el pueblo egipcio ya lo conocía o ponía en práctica técnicas similares. Pero es efectivamente en los 80 cuando se introdujo en España como actividad profesional en la construcción. Del mismo modo, no fue reconocida actividad regulada y profesión propia hasta el año 2000.

¿A qué se considera un trabajo vertical?

Es considerado vertical cuando se realiza en una altura a partir de dos metros de descuelgue. Se utiliza principalmente en la construcción y rehabilitación de fachadas y edificios. Se aplica en situaciones en que los métodos comunes no permiten alcanzar sitios de difícil acceso. Asimismo, el trabajador deberá contar con la protección de una barandilla, un sistema anticaída o de descuelgue con sistema de seguridad.

¿Cuáles son sus principales riesgos?

Como es de suponer, un trabajo de estas características presenta un alto factor de riesgo. A continuación, te detallamos cinco factores que nunca se deben dar:

- Utilizar una sola cuerda.

- Protección antirroce inapropiada.

- No asegurar el mosquetón.

- No comprobar los sistemas de seguridad.

- No realizar un nudo en el final de la cuerda.

En Alman, realizamos trabajos verticales en fachadas y estamos siempre a tu disposición,